¿Por qué mi hijo aún no camina?
Sin duda, esta es una preocupación y duda constante de muchos padres y cuidadores. Y es que se comienza a acercar el año de vida y mi hijo/a aún no logra dar sus primeros pasos. Y si, más encima, comparamos con otros niños de la misma edad, se nos viene a la cabeza, ¿estaré haciendo algo mal?, ¿le pasa algo a mi bebé que aún no se atreve a dar los primeros pasos?, ¿será porque no gateó?
En este artículo responderemos todas estas preguntas.
¿Qué es la marcha?
Lo primero que debemos tener claro es qué es la marcha. Esta consiste en una forma de desplazamiento a partir de la posición de pie de nuestro bebé. Inicialmente, es esperable que primero desarrolle la marcha lateral, es decir, que camine hacia los lados apoyándose en distintos muebles. Y una vez que se siente estable y seguro, comienza a dar pasos hacia adelante, ya sea para alcanzar un juguete que llame su atención, o llegar a los brazos de la mamá o papá.
¿A qué edad debería empezar a caminar?
Ahora, otro punto a considerar es cuándo y cuánto debo esperar a que se desarrolle la marcha. Y aquí, hay un punto muy relevante. A medida que el acto motor sea más complejo, es decir, que involucre un mayor número de músculos y movimientos para que se desarrolle, mayor será el rango de variabilidad para que este se presente. Por lo tanto, lo esperable para el desarrollo del caminar, es entre los 10 y los 18 meses de edad.
¿Cómo? ¿Entonces, no es al año?
¡No necesariamente! Recordemos que cada niño es un ser individual y particular que se ha desarrollado en un ambiente distinto, con diferentes estímulos y motivaciones. Por lo tanto, debemos ser respetuosos y esperar a que él comience a dar sus primeros pasos cuando realmente se sienta preparado para hacerlo.
¿Cuáles son los requisitos para que lleguen los primeros pasos?
- Que sea capaz de ponerse de pie por si solo, ya sea a partir de la posición de estocada o desde la postura de oso.
- Que logre mantenerse de pie haciendo equilibrio.
- Que inicie la marcha lateral, es decir, caminar hacia los lados apoyándose en muebles, tanto a la derecha como izquierda.
- Y por último, que camine entre muebles separados unos de otros, lo que llamamos marcha entre muebles islas. Y así, en ese espacio libre, se verá obligado a dar esos pasos sin apoyo.
¿Con zapatos o a patita pelada?
Es fundamental que, en todas estas experiencias, podamos otorgarle la oportunidad de realizarlas a pies descalzos o con calcetines antideslizantes. El uso anticipado de un zapato NO le otorgará mayor estabilidad, NO le dará mayor firmeza, y NO va a hacer que camine más pronto. El zapato cumple solo un rol protector del pie. Por lo tanto, su uso está indicado cuando ya ha comenzado a caminar de forma independiente.
Mi hijo aún no camina. ¿Cuándo me debo preocupar?
Nos debemos preocupar cuando está cerca o entrando a los 18 meses y aún no logra ponerse de pie solito, no logra mantenerse de pie, ni camina de forma lateral. Ahí ya es momento de consultar a tu pediatra, quien debe derivar a un especialista para evaluar.
Lo que si hay que tener claro es que el hecho de que no haya gateado no está asociado a un retraso de la marcha. Pero sin duda, el gateo, traerá muchos beneficios a su desarrollo en general.
Artículo preparado por Knlg. Daniela Mir Capurro
Daniella Mir Capurro, kinesióloga de profesión, ejerce desde hace 10 años, se dedica al área de la Neurorrehabilitación Infantil y mantiene una formación y actualización continua. Además, cuenta con 7 años de experiencia en Educación Especial y 3 años en un Centro de Estimulación Temprana de la Ciudad de Concepción.
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